A principios de octubre y aprovechando unos de esos días que tengo libres, quede con Piraña para ir a Gredos y darnos una caminata.
Aunque nos hubiera gustado hacer algo con cuerda, nuestra falta de material y sobretodo de experiencia, la mía de primero escasa y la de Piraña de segundo nula, hace que no nos veamos preparados y elegimos ir a la Galana.
Poco a poco cogemos ritmo, lo que quiere decir que tengo que ir corriendo para poder seguir las zancadas de Piraña. Y así como quien no quiere la cosa nos plantamos en la cumbre.
Era bastante pronto, así que, que mejor opción que tirar hasta el Almanzor. Después de sortear a gente en la trepada final nos pudimos dar un pequeño y relajado festín en la cumbre. Sorprendentemente en todo el rato que estuvimos no vino nadie.
Era bastante pronto, así que, que mejor opción que tirar hasta el Almanzor. Después de sortear a gente en la trepada final nos pudimos dar un pequeño y relajado festín en la cumbre. Sorprendentemente en todo el rato que estuvimos no vino nadie.