viernes, 21 de marzo de 2008

De vuelta por La Pedriza


Volvemos a actualizar el blog y es que por unas cosas y otras casi no habíamos hecho actividad. Pero para recuperar el tiempo lo hacemos por todo lo grande y nos fuimos cuatro días a La Pedriza. Tiempo suficiente para hacerse una idea de cómo se escala allí. Y es que si vas tienes que tener dos cosas muy claras: en La Pedriza te pones fuerte, esto es porque las aproximaciones a los sectores de escaladas se hacen durillas entre tanto bloque y tanta jara, además aquí si que se escala de piernas, después de un día de escalada lo que te arden no son los dedos sino los gemelos de tanta adherencia. Y lo otro que hay que tener caro es que las chapas alejan, hay que estar muy bien de coco, la primera suele estar muy arriba y las siguientes si alejan quiere decir que es fácil. Además otra cosa, el grado cuesta.

Como digo hemos estado cuatro días escalando, el sábado fuimos a las placas del Halcón Fran, César y yo, a hacer deportiva para cogerle el tranquillo a esto de la adherencia, ellos son más pedriceros por lo que les costó menos adaptarse y todo en lo que se metieron lo sacaron. Yo escalé bastante de segundo y solo saqué un par de V y algún V+ de primero. Después de un puñado de V terminaron el día sacando un 6a que les supo a poco.


Dormimos en Canto Cochinos y al día siguiente empezamos con lo bueno, nos fuimos hacer el Espolón de Peña Sirio. El primer largo es fácil y corto, el segundo comienza con una travesía de IV que da respeto y que como te subas mucho al principio te metes en un 6b como me paso a mí y por eso estuve un poco apurado, después coges un línea de setas y te plantas en la siguiente reunión fácilmente. Como me vi animado decidí darme el siguiente largo, también es un IV que va desplazándose hacia la izquierda por unos canalizos y te mete en una placa con mucho ambiente, será una tirada de unos 55m con 5 chapas de las que me pasé una por no leer bien la vía, así que no queda más remedio que tirar con decisión hasta la siguiente chapa.


El siguiente largo se lo dio César, es un V que sube por unos canalizos y está muy bien protegido. Para terminar te pones delante de un muro de unos 7-8 metros de 6a que Fran se dio muy bien y como llevábamos dos cuerdas también pudo dárselo César a flash y a mí me ayudaron un poco bastante a dármelo. Después en la cima estuvimos esperando a unos chicos conocidos de Fran que pretendían destrepar por una fisura un tanto peligrosa, así que les tuvimos que enseñar a rapelar y bajamos con ellos los tres rapeles que hay, el primero de ellos volao.

Volvimos a Canto Cochinos comimos y descansamos un rato y al atardecer César y yo tiramos para la pradera del Yelmo, donde dormimos en un refugio-vivac que nos había dicho Fran. El Yelmo es un bloque inmenso de granito que cuando te pones debajo de él impresiona. Escogimos las Walkirias para subirlo. El primer largo es un V de 40m con un par de pasos complicadillos bien protegidos que se dio César sin problema. El segundo largo continúas por la Ziggy Stardust, en principio me lo iba a dar yo pero eso de que la primera chapa esté a unos 10 metros y que aún no tengo suficiente pericia en la adherencia pedricera me echaron para atrás y se lo volvió a dar César, la verdad es que luego no tuve ningún problema, así que tengo que ir preparando la cabeza para atreverme a dar largos de primero en clásica. Para terminar te queda un largo de III y una trepada hasta la cima, desde donde se ven todos los grandes bloques de la Pedriza. El descenso se hace destrepando la Valentina que no tiene complicación y además para terminar tienes que bajar por una babaresa que le da bastante gracia.


Una vez abajo, volvimos a coger las mochilas y bajamos por el collado de las dehesillas para que yo conociera la Pedriza posterior. Después de una larga caminata nos echamos a dormir en otro refugio-vivac entre los pinos que hay a un lado del camino en la “autopista” mas o menos a la altura del Cancho de los Muertos, que es donde terminamos nuestro viaje por la Pedriza.

El martes se levanto amenazando de lluvia, así que sin perder tiempo subimos hasta pie de vía, que no se como se llama. Esta es de clásica y es diferente a las otras porque no es de adherencia, por fin tienes donde agarrar y tiene un primer largo de IV que va pasando de una fisura a otra, la escalada es un poco arrastrada y termina pasando un pequeño resalte. Y el siguiente largo es muy corto y la gracia que tiene es que vas por una fisura hasta llegar a unas setas y a partir de ahí esta todo hecho.

Pues esto es todo lo que hicimos en la Pedriza mucha escalada y también bastante pateada para que salga una actividad bastante completa, como nos gusta a nosotros.

5 comentarios:

Alberto dijo...

¡¡¡Bueno bueno bueno, cómo está el personal!!! Grandes vías en un lugar sólo para "másquinas" (de mente y de técnica)... Habrá que darse caña para no quedarse atrás.

César dijo...

Enhorabuena a nuestro primer comentarista!!! En breve recibirá un premio para usted y solo usted (mala suerte para los que no comentaron aún)

Alberto dijo...

:D Qué bueno!!! Ya lo estoy esperando con impaciencia!

Anónimo dijo...

eeeeeee!!! que yo pensaba que había que estar registrado para escribir...pero ya he hecho mis comentarios orales, jeje!!

Pues nada, enhorabuena a Pablo y César, sois unos cracks, super-técnicos...ya no puedo ir con vosotros al monte...aunque todavía me acuerdo del día que Pablo nos llevó al Morezón por error, jijiji!!!

Pablo, Dobresengros nos llama... César, ¿te apuntas? jejeje

A seguir con vuestras aventuras!!!

Javier de Prado dijo...

¡¡Que ganas me han dado de volver a la pedriza con vosotros!!

Que chula la aventura y que chulas las fotos. :)